El mundo del triatlón nacional todavía llora la pérdida de uno de los mejores triatletas de media y larga distancia de España. El extremeño Diego Paredes de 42 años falleció, según confirmaron amigos suyos, el 23 de septiembre en su casa de Coria.
El extremeño era muy activo en las redes sociales, y en sus últimas publicaciones de Instagram había escrito unos mensajes alentadores con los que, de alguna forma, avisaba de que se acercaba la que ha sido la última meta de su carrera más difícil. "Los principios dan miedo, los finales son tristes, pero lo más importante es el camino" u otra en la que parafrasea al mismísimo Marco Aurelio: "Un hombre no debería tener miedo a la muerte, debería tener miedo a no empezar nunca a vivir".
Diego consiguió ser uno de los triatletas de media distancia más importantes de España: ganador en Full Vitoria 2015, ganador en Desafío Castilla y León Ciudad de Salamanca 2016 y varios triunfos en Cabo de Gata, pero también en competiciones de larga distancia. Porque alcanzó su mayor éxito en 2014, cuando acudió al Campeonato del Mundo de Kona en Hawai. Hasta allí llegó tras lograr un segundo puesto en el Ironman de Niza. En la prestigiosa isla hawaiana logró cruzar la meta en una merecida octava posición en su grupo de edad, con un tiempo de 9:11:31. El año anterior, en 2013, se había hecho con la victoria en Lanzarote.
