Cuando Camilo Santiago suplantó la identidad de Iván Zarco en el pasado maratón de Dresde, ninguno de los dos corredores sabían cómo acabaría este rocambolesco episodio. Mientras que el atleta riojano de 38 años ha sido sancionado con la prohibición de competir en los próximos dos años, el español de nacionalidad hondureña estará en la línea de meta del maratón olímpico de Tokio 2020 el próximo 8 de agosto gracias a una plaza de universalidad, ya que será el único representante de Honduras. Aunque parece extraño, aún aparece en la lista de maratonianos de los Juegos Olímpicos.

Iván Zarco supuestamente viajó hasta la ciudad alemana para llevarse el billete para Tokio tras haberse ganado la plaza en el Mundial de medio maratón de Gdynia con un tiempo de 1h04:08, que fue récord hondureño. Camilo Santiago lo acompañaría para hacer la labor de liebre y ayudarle a conseguir su objetivo. Sin embargo, el que estuvo en Dresde, ataviado con una vestimenta con la que intentaba pasar desapercibido y el dorsal de Zarco, fue el riojano que cruzó la línea de meta en un tiempo de 2h17:46.

Este tiempo se le computó a Zarco como nuevo récord hondureño de la distancia y sigue figurando en la página web de World Athletics. "El corredor de 100 metros (Melique García) tuvo problemas con su pasaporte y el de 800 metros que estaba mejor rankiado (Elvin Josué Canales) tuvo problemas de cupo en el evento de 800. Zarco estaba listo para los Juegos", ha explicado el presidente de la Federación Hondureña de Atletismo Calixto García en una entrevista a 'Soy Corredor'.

Honduras no tenía ningún atleta con mínima olímpica, por lo que Calixto decidió llamar a Iván Zarco para que sea él que acuda hasta Tokio como invitado de World Athletics, tal y como cuenta. El atleta nacido en España y que compite por Honduras desde el 1 de enero de 2020, corrió en la Maratón de Valencia de 2019 en un tiempo de 2h18:19, marca con la que aparece inscrito en Tokio, si bien está lejos de la mínima de 2h11:30 que exige World Athletics.

Sin embargo, aquí el gran afectado de todo este embrollo ha sido Camilo Santiago que además de perderse los Juegos Olímpicos, estará dos años sin poder competir.