- Un 10.000 y un maratón en 33 horas: Sifan Hassan en plan Emil Zatopek para los Juegos Olímpicos de París 2024
- Sifan Hassan es la atleta más polivalente del mundo con 2h13 en el Maratón de Chicago
- Beatrice Chebet se corona como la nueva reina del fondo en París con Sifan Hassan de nuevo en el podio
Parecía una locura. Todos los pronósticos iban contra su gran apuesta, pero no hay pronóstico aplicable a superhumanas como Sifan Hassan. En la mismo semana en la que ha sido bronce olímpico en 5.000 y 10.000 metros sobre la pista de París, la neerlandesa obra el milagro y se corona como la reina de la maratón, récord olímpico mediante, para completar un triplete histórico de más de 62 kilómetros de competición.
Son los segundos Juegos Olímpicos consecutivos en los que Hassan se cuelga tres medallas olímpicas, después de su triple podio de Tokio 2020 con oros en 5.000m y 10.000m. En esta ocasión, la suerte no le sonrió sobre la pista y el poder de Beatrice Chebet fue demasiado para que la europea opositara a revalidar sus títulos olímpicos, pero consiguió no fallar en ninguna de las pruebas: doble bronce. El primero, el lunes, en 10.000m. El segundo, el viernes, en los 5.000 metros. Solo dos días después, su última bala: la maratón.
Ningún factor hacía favorita a la candidatura de Sifan Hassan por el trono de los 42 kilómetros. Junto a ella, varias de las mujeres más rápidas de la historia de la prueba, Tigist Assefa (récord mundial) o Peres Jepchirchir (récord mundial en carreras de solo mujeres). Ella, todo sea dicho, llegaba como la segunda más veloz de todos los tiempos con sus 2h13:44 de Chicago, aunque dos segundos más lenta que el récord de Assefa. En adición, todo el poder del resto de corredoras kenianas y etíopes, como Hellen Obiri, Sharon Lokedi o Amane Shankule. Por delante, un salvaje desnivel en uno de los circuitos de maratón más exigentes que se recuerdan en el olimpismo. La mañana anterior, estas cuestas acabaron con las esperanzas de hombres como Bekele, Kipchoge o Kiplangat. Tras 20.000 metros de competición en la pista, no parecía el mejor de los contextos para Hassan.
La igualdad marcó la carrera de inicio a fin. Un gran grupo de candidatas se unió desde la primera zancada para, en un ritmo muy rápido, ir dejando atrás a las mujeres que no pudieran opositar al podio, una a una. Pasadas las subidas más letales, el grupo se dividió, antes de unirse en la cuesta abajo, donde se igualan de nuevo las fuerzas. Arriba, todas las favoritas: Assefa, Hassan, Lokedi, Shankule, Obiri, Jepchirchir. Juntas, pasan el kilómetro 30 en torno a 1h44:02.
La primera en caer fue la campeona olímpica de Tokio, Peres Jepchirchir, que no pudo seguir a las líderes más allá del kilómetro 34 y se hundió al perder su rueda. Pasada la marca del cuadragésimo mil, fue la etíope Amane Shankule quien se quedó atrás. Restó una lucha a cuatro por el oro en los últimos dos kilómetros.
Camino al final, las kenianas se cayeron de la candidatura al primer puesto. Primero fue Lokedi y después Obiri: las dos mujeres más rápidas de la historia, Tigist Assefa y Sifan Hassan, tendrían un sprint final por la gloria olímpica. En una carrera que se decide por la velocidad, ser una de las mejores atletas de pista del mundo fue decisivo a favor de Sifan Hassan. Pisando ya la moqueta azul que acoge la meta en París, en un sprint inolvidable, la neerlandesa puso el turbo y pasó por el interior a la etíope en una acción accidentada con un contacto que podría haber sido trágico para ambas. Ya en solitario, Sifan Hassan voló por la recta final para hacerse con el oro en 2 horas, 22 minutos y 55 segundos, un nuevo récord olímpico. Emula así el triplete de Emil Zatopek, con dos bronces y un oro en lugar de tres títulos. Una de las grandes proezas de los Juegos Olímpicos de París 2024, con 33 horas de diferencia entre su bronce en los 5.000 metros y esta final de la maratón.
Tigist Assefa fue segunda por tres segundos y recolectó la plata para Etiopía. Por orden inverso al de caída del grupo de cabeza, el resto de candidatas llegaron a meta poco después. El bronce fue para Hellen Obiri, con una marca personal de 2h23:10; Sharon Lokedi hizo lo propio en la cuarta plaza, con 2h23:14. No fue igual de bueno el desenlace de Peres Jepchirchir, que fue 15ª con 2h26:51.
La mejor representante española en meta fue Majida Maayouf, 17ª con 2h28:35, que estuvo metida en el grupo de cabeza hasta el cambio de las africanas y Hassan, con una estrategia agresiva y ruidosa. Meritxell Soler logró una gran 25ª plaza con 2:29,56 y Ester Navarrete, campeona de España, cerró su maratón olímpica en 2h32:07, en el puesto 42. Buen papel de las españolas, todas en la mitad alta de la clasificación, en un circuito infernal.
Álvaro García es un estudiante de periodismo de la Universidad Complutense de Madrid cuya pasión es la comunicación y el deporte. Sobre todo la comunicación deportiva.
Se enamoró del deporte a los tres años, viendo los Juegos Olímpicos de Beijing en un hotelillo de Fuerteventura. Desde que le regalaron una máquina de escribir a los 12 años no ha parado de hacer artículos sobre todas las disciplinas deportivas que conoce. De esta forma se dio cuenta de que quería ser periodista muy temprano y decidió fundar su propia revista deportiva, Chapman. Revista en la que tratan temas relacionados con la actualidad deportiva del fútbol, baloncesto, tenis y atletismo, entre otras especialidades.
Gracias a ello ha estado acreditado en competiciones de RFEA y World Athletics, mundiales FIBA, Liga ACB, mundiales de hockey hielo, de X-Trial, partidos de rugby en el Metropolitano y muchos otros eventos que antes seguía por televisión.
Tiene la costumbre (o manía) de ir estrechando manos y presentándose a colegas y deportistas. Y es un aficionado al deporte de domingos, el de ver en el sofá y el de jugar con amigos en el primer terreno que se preste.
Actualmente lleva las redes de Runner’s World y escribe sobre actualidad del mundo del atletismo los fines de semana.